Verónica Camino en el Cepredey, una caja chica para financiar campañas y carreras políticas
-La investigación iniciada por la Contraloría a la administración que encabezó Verónica Camino sacaría a la luz el uso ilegal de recursos
Mérida, Yucatán, 17 de diciembre de 2019.- La investigación que por presuntos malos manejos en el Centro Estatal de Prevención Social del Delito y Participación Ciudadana (Cepredey) inició la Contraloría General del Estado durante el tiempo en que la hoy senadora Verónica Camino Farjat fue su directora, estaría relacionada con el uso de los recursos de esa dependencia, creada en tiempos del exgobernador Rolando Zapata Bello, como caja chica para financiar campañas y carreras políticas.
Entre esas campañas estaría la de la misma Camino Farjat, quien llego a ese puesto apadrinada por Víctor Caballero Durán de quien fue su peón, ya que hacía todo lo que le ordenaba. Como premio la promovió al Congreso local y con dineros del Cepredey se habría financiado la campaña que le permitió ser diputada local de 2015 a 2018 por parte del PRI.
Este premio se debió, se afirma, a obedecer incondicionalmente a Caballero Durán, pues su trabajo mediocre en el Cepredey no era para ser reconocido ya que el tiempo que Verónica Camino presidió esta dependencia, nunca se observó un resultado tangible en el combate a la inseguridad en el sur de Mérida, que es donde los trabajos del Cepredey se concentraron, por el contrario la delincuencia aumentó. Esto contrasta con su altanero ofrecimiento de dar consejos sobre seguridad.
Luego de sus años como diputada local, en los cuales jamás cuestionó el desfalco monumental en el Isstey causado por el boquete de más de 2 mil millones de pesos dejado por Ivonne Ortega Pacheco, de nuevo fue premiada e impulsada por Caballero Durán con la candidatura al Senado, pero ahora y sorpresivamente por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM).
Sin embargo, otros opinan que ese cambio del PRI al Verde no es raro, pues se indica que Camino Farjat es un buen ejemplo de los políticos chapulines, ya que su carrera política empezó en el PRD cuando su madre, la exalcaldesa de Tizimín y exdiputada local por el PRI, Verónica Farjat abandonó las filas tricolores para sumarse al partido del Sol Azteca.
Luego de su estadía en el PRD, y por así convenir a sus intereses particulares y sus ambiciones políticas, la hoy senadora regresó al PRI donde, como ya se dijo, le dieron la oportunidad de ser la directora del Cepredey en el gobierno que encabezó Zapata Bello. Luego fue diputada local por el mismo tricolor y hoy es senadora por el Verde Ecologista. Y, por si fuera poco, se dice tiene un acercamiento con Morena, tan notorio que hay quienes señalan que eso tiene muy inquieto al delegado “Huacho” Díaz Mena.
Con respecto a la investigación en el Cepredey, se dice que Verónica Camino sabe que hay opacidad en su gestión y pretende aparentar una disposición que en realidad responde al nerviosismo y temor de que salgan a la luz los malos manejos y el uso ilegal de recursos. Esto más que ser una muestra de buena voluntad y de que “el que nada debe nada teme” es un indicio de que sabe que hay evidencias de algo sucio y siguiendo su estilo de usar refranes hay que recordar que “donde menos se espera, salta la liebre”.