Exfuncionario involucrado en trata de blancas y sobornos sexuales pretende ser magistrado del Tribunal Electoral en Yucatán
-Hernán Jesús Vega Burgos fue destituido en 2009 como Delegado del Instituto Nacional de Migración (INM) e inhabilitado para ocupar cargos públicos
-Vega Burgos salió huyendo del estado y se fue a refugiar a Chiapas, regresó a Yucatán en 2018
-El Senado no debe permitir que un sujeto con tan negro historial y baja moral ocupe un puesto tan importante en Yucatán
Mérida, Yucatán, 27 de septiembre de 2019.- Hernán Jesús Vega Burgos, quien fuera Delegado del Instituto Nacional de Migración (INM) y dejara el cargo hace una década al ser involucrado en un sonado caso de trata de blancas, sobornos sexuales y corrupción se inscribió en el proceso convocado por el Senado de la República para elegir a 21 Magistrados Electorales Locales de todo el país.
De acuerdo con una lista en la que aparecen varios aspirantes que buscan esa designación por Yucatán, Vega Burgos envió la documentación en lo que es la primera fase del proceso que concluirá el próximo 17 de octubre.
Según amplia información consignada por la prensa de la época, Hernán Vega Burgos era titular de la delegación del INM desde el 1 de septiembre de 2007 y se mantuvo en el cargo hasta el 17 de junio de 2009, cuando se vio obligado a dejar el puesto luego de que se descubriera en Yucatán una red de trata de blancas, principalmente costarricenses, que eran traídas al estado por una mujer de nombre Keysi González Corrales, presunta lenona que las mantenía retenidas en una casa de la colonia México y a quien se le dio el sobrenombre de la “Madame”.
A Vega Burgos se le acusó de cobrar, en dinero y con favores sexuales, los permisos para que las costarricenses estuvieran en Yucatán sin problemas. Keysi González le pagaba 2,000 pesos por cada muchacha que traía de Costa Rica y 15,000 al mes para que la dejara trabajar prostituyendo a las jóvenes. Sin embargo, el delegado no se conformaba con el dinero, sino que además exigía que las chicas mantuvieran relaciones sexuales con él.
Aunque él siempre negó todo, durante el proceso de investigación se le citó a comparecer en una audiencia en la que por sorpresa se le careó con una de las jóvenes obligadas a prostituirse con políticos y gente de mucho dinero, su nombre era Raquel Ivannia Canales Acevedo.
Durante el interrogatorio se hizo pasar a Raquel Ivannia, quien había denunciado antes que era víctima de trata, y se le preguntó si podía identificar entre los presentes a la persona que señala en su acusación y con quien fue obligada a tener relaciones sexuales en tres ocasione en un motel llamado “Recinto Real”. La muchacha levantó la cara y directamente apuntó a Vega Burgos para decir: ¡Ese es! ¡Él es Hernán! El delegado de Migración, quien sudaba copiosamente, palideció y no pudo articular ninguna palabra.
La joven, en su declaración de acusación, afirmó que las extranjeras que llegaban con Keisy tenían obligatoriamente que tener relaciones con él. Al funcionario se le identificaba como “el mero mero de Migración”. También narró que le habían advertido, en una de las tres reuniones que tuvo en el motel, que si no aceptaba tener sexo con Vega Burgos le podía ocurrir lo que le sucedió a la “colombiana”, una joven que se dijo fue golpeada y violada.
Luego del careo sorpresa con Raquel, hicieron entrar a otra joven, de nombre Yoheny Chávez Fonseca, quien también había declarado que la semana en que se descubrió todo le habían advertido que ahora le tocaría a ella tener relaciones sexuales con Vega Burgos, como lo había hecho su compañera Canales Acevedo, pues era parte de los servicios obligatorios que debían cumplir para que el funcionario dejara trabajar a Keysi González.
La pregunta del Ministerio Público fue la misma, pero la respuesta diferente: “No conozco a ese señor, pero he oído hablar de él”, contestó la extranjera y la desalojaron del cubículo.
Luego de estos careos, que no estaban programados, Vega Burgos pasó de testigo a indiciado y el casó llegó a la Procuraduría General de la República (PGR). Sin embargo, conforme fue avanzando el proceso, salieron a relucir errores en la investigación, violación de procedimientos y mala integración de los expedientes por parte de la Procuraduría estatal de la entonces gobernadora Ivonne Ortega Pacheco, lo que obligó a dejarlo libre de sanción penal, aunque administrativamente se le inhabilitó para ejercer cargos públicos.
La presunta lenona Keysi González y varios de sus cómplices pasaron varios años en prisión, pero también fueron liberados por errores en la investigación. En ese tiempo en la Procuraduría local estaba como Subprocurador Rafael Acosta Solís, quien era el encargado de las investigaciones.
Vega Burgos, quien había sido el alumno con mejor promedio de su generación en la carrera de Derecho en la Universidad Autónoma de Yucatán, antes de ser delegado del INM había trabajado del 1 de septiembre de 2006 al 30 de junio de 2007, en la Procuraduría General de Justicia del Estado de Yucatán, como Subprocurador de Delitos Electorales; posteriormente, ingresó el 1 de septiembre de 2007 al INM, el que dejó por inhabilitación el 17 de junio de 2009.
Desparece de la vida pública, pero el 22 de agosto de 2016, 7 años de después, se le encuentra como Subdelegado de Procedimientos Penales de la PGR en Chiapas. Ahí permanece hasta el 30 de abril de 2018. Un mes después, el 1 de junio, aparece en el organigrama de la Administración Portuaria Integra de Progreso S.A de C.V. como titular del Órgano Interno de Control.
Ahora, una década después del escándalo de trata de blancas y delitos sexuales, pretende regresar como Magistrado del Tribunal Electoral y ha entrado al proceso convocado por el Senado de la República el 11 de septiembre pasado. Del 17 al 20 se recibieron los documentos de los interesados en ser candidato, entre los que está Vega Burgos.
Del 23 al 26 de este mes se validó dicha documentación. El 27 fueron enviadas todas las carpetas a la Comisión de Justicia del Senado, quien emitirá la metodología de evaluación. Luego, los que hayan cumplido los requisitos comparecerán entre el 11 y el 13 de octubre para que el 14 la Comisión emita su dictamen y lo regrese a la Junta de Coordinación Política del Senado. Será el 17 de octubre cuando se designe a los 21 magistrados y magistradas del país.
Al conocerse la pretensión de Vega Burgos de ser Magistrado ya han saltado las voces en contra las cuales señalan que sería inconcebible que una persona con un historial tan negro, que sólo se salvó de la cárcel por la ineficiencia de la entonces Procuraduría estatal, pudiera ser Magistrado del Tribunal Electoral. Su baja calidad moral y su alto grado de corrupción son suficientes para desecharlo.
Se espera que las y los Senadores de la República cumplan con su deber de rechazar totalmente la corrupción y no permitan que Yucatán tenga a un individuo de esa calaña en un puesto tan alto y de tanta responsabilidad.